Buen diseño, materiales y acabados perfectos. La altura del tubo es perfecta para que el gato se pueda estirar completamente para rascar y, gracias a su peso, no se mueble nada aportándole estabilidad.
La base superior es amplia y le encanta estirarse en ella mientras apoya el cuerpo en su contorno. Le gusta más sin el cojín que trae; es muy suave y mullido pero a mí gato no le gustan los cojines, por eso se lo he quitado.